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Elon Musk era considerado por firmas como First Round Capital, el hombre más admirado por creadores de startups en Silicon Valley.
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Musk ya forma parte de listados como el World’s Billionaires List: The Richest in 2022.
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Junto a Twitter, opciones como Mastodon se han vuelto cada vez más demandadas.
Las decisiones pudieron ser acertadas o no, pero todo lo que Elon Musk da a conocer en Twitter es ensombrecido por la reputación que tiene, y que se ha vuelto negativa pues recordemos que el famoso multimillonario anunció una serie de despidos, que hasta ahora siguen dando un mal mensaje de la red social, cuyo control recién tomó a finales de este año.
Frente a este fenómeno es interesante medir el desempeño de las redes sociales y cómo estas plataformas de ocio son maquinarias de hacer dinero, consolidando un selecto grupo de propietarios de redes sociales, tal como el que se enlista en el “World’s Billionaires List: The Richest in 2022”.
“El impresionante crecimiento de las empresas de redes sociales a principios de la década de 2010 hizo que muchos fundadores fueran extremadamente ricos. El fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, es el empresario de redes sociales más rico del mundo, con un patrimonio neto personal de 67 mil 300 millones de dólares, que decreció de los 97 mil millones de dólares en 2021. Zhang Yiming, el creador de TikTok, tiene una fortuna con valor de 50 mil millones de dólares”, explica S. Dixon, analista de Statista al presentar este estudio.
Musk crece la red social equivocada
Elon Musk ha hecho que el número de suscriptores de Mastodon pasara de 130 nuevos usuarios por hora en octubre a dos mil por Gora luego de que Elon Musk tomó control de Twitter.
Dicho incremento es un fenómeno innusual, pues Musk, lejos de fortalecer a su empresa recién adquirida, la debilitó ante Mastodon, al menos en el número de nuevos suscriptores por hora que se registraron.
La decisión de Musk sobre los sacrificios de los empleados en Twitter, así como medidas implementadas en el negocio, nos dan cuenta de lo importante que es en consumo de contenidos, al menos dentro de redes sociales, el valor de las plataformas y la reputación con que cuentan, pues en ello se basa la atracción de talento e interés por suscribirse a su servicio.
“Está claro que no tenemos una bola de cristal para predecir lo que sucederá en el corto y mediano plazo. Pero si tomamos nota de los antecedentes históricos, los desafíos que se presentaron en el pasado con cada innovación tecnológica, y la velocidad con la que ocurren los cambios, estaremos mejor preparados para afrontar los desafíos que están sobre la mesa de la ciberseguridad y también aquellos que están cocinándose para más adelante.”, concluye Camilo Gutiérrez Amaya, Jefe del Laboratorio de Investigación de ESET Latinoamérica, al hablar de lo que se espera en la industria tecnológica y digital, donde las redes sociales juegan un rol clave.
Así como Twitter está perdiendo interés ante competidores como Mastodon, perder el control de una empresa es un fenómeno que no se puede permitir un multimillonario, menos ahora que la inflación está golpeando estos negocios.
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