De acuerdo con El Instituto Nacional del Emprendedor, se estima que dentro del territorio nacional existen poco más de 4 millones 230 mil pequeños y medianas empresas, del mismo modo datos proporcionados por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), señalan que 7 de cada 10 empleos en México, los crea un emprendedor, por lo que de la misma manera el Estudio de la Demografía de los Negocios (EDN), señala que en México, durante el 2020 nacieron 619,443 establecimientos, mientras que 1,010,857 cerraron sus puertas definitivamente, este mismo estudio dio a conocer que en 2021, se nacieron poco más de 1.2 millones y mientras que cerraron 1.6 millones de pymes.
Se estima que en México las Pymes generan al menos el 72 por ciento del empleo, además de generar poco más del 52 por ciento de Producto interno Bruto (PIB) esto en concordancia con datos proporcionados el (INEGI), mientras que estudios como el realizado por “Digital Fuel. Igniting enterprise transformation and growth”, y datos propinados por Custom Planet Digital, señalan algunas de las tendencias que permitirán a las Pymes posicionarse de manera efectiva en la preferencia de los consumidores entre las cuales la propiedad intelectual jugara un papel clave.
Propiedad Intelectual como herramienta de crecimiento para las Pymes
Como lo señala Guillermo Solórzano, Socio Fundador de Solórzano Linaldi (SL), firma mexicana con más de 25 años de experiencia, la propiedad intelectual y el resguardo de la información es fundamental: “actualmente, la globalización y el Internet demandan procesos necesarios para proteger sus marcas, invenciones, pero, sobre todo, sus secretos industriales. Todas ellas fundamentales para mantener un desarrollo económico próspero tanto de las grandes empresas como las MIPyMES”.
Es por ello que se puede recurrir a la propiedad intelectual como parte de una estrategia de crecimiento para las pequeñas y medianas empresas, por lo que los siguientes ejemplos pueden resultar de gran ayuda.
- Marcas registradas: conformadas por denominaciones, letras, números, elementos figurativos, combinaciones de colores, hologramas, sonidos, olores, entre otros, que identifican a un producto o servicio, y que permiten impedir a alguien más usarla o copiarla.
- Patentes: derecho exclusivo y temporal de explotación sobre una invención que sea novedosa, resultado de la actividad inventiva y que tenga aplicación industrial.
- Derechos de autor: entre estos se encuentran los derechos que los creadores tienen sobre sus obras artísticas y literarias en todas sus manifestaciones (libros, pinturas, música, esculturas, anuncios, etc.).
- Secretos industriales: información estrictamente confidencial, de aplicación industrial o comercial que representa una ventaja competitiva o económica frente a terceros y sobre la cual se ejerce el control legal.
- Franquicias: implican la licencia de uso de una marca registrada junto con la transmisión de conocimientos técnicos para la producción o venta de bienes o prestación de servicios de manera uniforme.
El proteger la propiedad intelectual, resulta cada vez más importante, puesto que, el mantener un óptimo registro, puede permitir a las Pymes, crecer, evitando multas, infracciones, además de fomentar el desarrollo tanto personal como personal.
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