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Medios indistintamente han reportado muertes por gripe del camello provenientes del mundial de Qatar.
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Algunos futbolistas franceses aparentemente se habrían contagiado del virus, entre los que destacan Kingsley Coman, Adrien Rabiot y Dayot Upamecano.
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En aeropuertos de México y clínicas españolas, por ejemplo, ya se implementan los protocolos con especial atención en síntomas relativos al virus MERS.
El legado que deja el Mundial de Qatar 2022 es la nueva “gripe del camello“, derivada del virus MERS, el cual se halla directamente relacionado con la familia del SARS-CoV-2.
Sin embargo, una verdadera manera de entender esta noticia, para muchos analistas, es a partir de la inquietud, de la perturbación y la ansiedad. Si no ha quedado muy claro este punto, habrá que explicarlo a través de un recuento y de un análisis que pone en evidencia el verdadero impacto de la que muchos consideran la última variante letal del Covid.
¿Qué es la gripe del camello?
Hace 10 días, cuando el cronista deportivo Grant Wahl murió mientras trabajaba en Qatar, algunos medios reportaron que su deceso se debía a que parecía una bronquitis. No obstante, luego de distintas versiones reportadas, se especuló que el estadounidense podría haber presentado el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS).
Un artículo de The Lancet titulado ‘The Qatar FIFA World Cup 2022 and camel pageant championships increase risk of MERS-CoV transmission and global spread’ describió este virus de la siguiente manera:
‘’Estos patógenos incluyen el altamente letal MERS-CoV. Los camellos dromedarios en el Medio Oriente son un importante reservorio de MERS-CoV. Los seres humanos se infectan esporádicamente a través del contacto directo o indirecto con camellos o productos lácteos de camello infectados con MERS-CoV’’.
Dos periodistas más, seguido de este caso, fallecieron en Qatar, con lo que la paranoia se incrementó. El virus, sin embargo, fue detectado muchísimo tiempo antes del coronavirus que conocemos. El primer caso se dio en Arabia Saudita en 2012 y desde entonces se han registrado solamente 894 decesos y entre 2 mil 500 y 2 mil 600 casos de infección, es decir que sólo un 35 por ciento fallece.
La alerta del brote, en este sentido, comenzó para los medios cuando se detectó en algunos futbolistas del Mundial. Algunos de estos fueron los franceses Kingsley Coman, Adrien Rabiot y Dayot Upamecano. A pesar de que es mucho más letal que el coronavirus al que estamos acostumbrados, el contagio es mucho más complicado.
Esta enfermedad, según los estudios disponibles al respecto se ha registrado en países como Qatar y Arabia Saudita, por el contacto con camellos (de ahí el nombre). A pesar de eso, los contagios que se confirmaron en el Mundial de Qatar no han sido comprobados, incluso se estima que hallan sido brotes de gripe común, puesto que los futbolistas se recuperaron bastante rápido, tan así que pudieron disputar la final contra Argentina.
Incluso, días después, la familia del periodista compartió la autopsia de Wahl, en donde se aclaraba que había muerto por un aneurisma en la aorta, nada que ver con el virus del camello y poco más con la bronquitis. Sin embargo, la alerta y la paranoia ya se ha propagado a través de redes sociales, medios de comunicación y distintos canales, mismos que comienzan a señalar a este virus como un nuevo brote más letal.
Crisis y paranoia: despliegan operativos en aeropuertos
Pese a que aún no se ha dado un informe médico oficial sobre los casos de gripe del camello, esta propagación mediática ha movilizado a las autoridades. De hecho, en la mayoría de los aeropuertos principales de México ya han comenzado a implementarse operativos con el objetivo de identificar posibles casos de la gripe del camello, mismo por el que pasarán todas las personas provenientes del Mundial de Qatar
Esto recomendó la Clínica del Viajero de la UNAM a medios:
“A su regreso deberá recibir atención médica urgente ante la presencia de fiebre y síntomas de enfermedad respiratoria, tales como tos o falta de aire, dentro de los 15 días posteriores a un viaje de Asia Occidental”.
Asimismo, se pidió a aeropuertos y aerolíneas respectivamente informar sobre los posibles casos de pasajeros según los síntomas presentados, tales como los respiratorios, fiebre, tos, expectoración de sangre, diarrea y vómitos. Se pidió tomar extremada precaución a los paisanos, pues en algunos casos habrá quien no reporte ningún síntoma y pueda propagar el brote en suelo mexicano.
Otro de los países que también comenzó a implementar estas medidas es España, país en donde se realizan pruebas con especial atención en aquellos que presenten síntomas respiratorios compatibles a esta enfermedad y hayan visitado los países de la península arábiga en los 14 días previos.
Estas advertencias llegaron a grandes instancias como la Organización Mundial de la Salud (OMS), misma que solicitó a los fanáticos que asistieron al Mundial de Qatar 2022 estar pendientes a los distintos síntomas de la enfermedad.
“Gripe del camello”, el legado de Qatar 2022 que incentiva la paranoia
En México, recientemente se advirtió a la población sobre la posibilidad de atravesar una sexta ola de contagios. Esto debido a que entre el 22 de noviembre y el 13 de diciembre, los casos activos en México alcanzaron cifras cuatro veces mayores a las registradas
En voz del subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, “los casos, en comparación con la velocidad que se registró la cuarta o quinta ola, incrementan de manera gradual”, por lo que el delirio de una nueva reclusión comienza a figurar nuevamente en la conversación.
De acuerdo a los datos mostrados por el subsecretario, se registraron para el corte del 13 de diciembre, 20 mil 642 casos de Covid-19. En contraste, al corte del 22 de noviembre ) los casos apenas rosaban los 5 mil 957, es decir, 14 mil 685 casos menos. A este temor de estallar en una nueva ola se le une la propagación mediática de la gripe del camello. Con estas dos amenazas, el aumento progresivo de los casos podría atacar al sector económico.
En un escenario quizá completamente fatalista, pensar en una segunda reclusión podría afectar nuevamente a todos los sectores, los cuales pese a haberse adaptado a un mundo omnicanal o “figital“, volverían a tratar con temas de distanciamiento, movilidad laboral y mucho más, lo cual impactaría directamente en las industrias.
Hospitales privados subieron sus cuotas y se distanciaron mucho más de las clases socioeconómicamente desfavorecidas, mientras que los hospitales públicos se abarrotaron y resultó imposible garantizar la atención para todas las personas. Estos riesgos podrían presentarse o no, sin embargo, hasta no ser un problema real la gripe del camello, lo mejor sería evitar la desinformación y esperar a que los comunicados oficiales de organismos detecten casos de manera que puedan ser comprobados y reportados sin objeción alguna.
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