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AMLO buscaría terminar con los fideicomisos del Conacyt otorgados a empresas privadas.
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La insitución cambiaría de nombre al Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación.
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Entre lo que se propone se destaca que la institución deberá otorgar de manera directa el apoyo económico a sus investigadores.
El Presidente, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha presentado una iniciativa para reformar y reemplazar al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) por un organismo mucho más transparente y que trabaje en favor no de las empresas privadas, sino en favor del país.
El Conacyt es actualmente, y tal como es definida por el propio Gobierno de México, “la institución que se encarga de establecer las políticas públicas en materia de humanidades, ciencia, tecnología e innovación en todo el país con el objetivo de fortalecer la soberanía científica e independencia tecnológica de México y bajo los principios de humanismo, equidad, bienestar social, cuidado ambiental y conservación del patrimonio biocultural”.
La labor del Consejo es la de promover y desarrollar estrategias en todas estas áreas para fomentar el desarrollo del país, impulsando así la ciencia y la investigación en todos sus ámbitos. De ahí que la institución tenga la facultad de otorgar becas a jóvenes creadores e investigadores de diferentes ramas, incluyento a las humanidades.
Con ello, el proyecto logra beneficiar a 85 mil estudiantes y a más de 36 mil investigadores consolidados, algunos de ellos siendo miembros activos del Sistema Nacional de Investigadores y del Programa Investigadoras e Investigadores por México.
El Conacyt además se encarga de coordinar el sistema de Centros Públicos de Investigación, el cual se compone por 26 instituciones de reconocimiento mundial. La actual directora del Consejo es la Dra. María Elena Álvarez-Buylla Roces, quien no se ha expresado al respecto.
AMLO buscaría desaparecer el Conacyt; en esto consiste la iniciativa
Durante su Tercer Informe de Gobierno, ya el Presidente López Obrador había anunciado la restructuración del Conacyt y que este operaría distinto para realizarla, aunque no se especificó cómo lo harían. Ahora, a unos meses del Cuarto Informe de Gobierno y con logros de la 4T recientes como la propuesta de ‘Vacaciones dignas’ y el ‘Plan B’ a su Reforma Electoral, el Presidente AMLO ha tomado vuelo y ha presentado la iniciativa para eliminar el Conacyt y reemplazarlo por el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación.
Esta decisión se haría efectiva debido al trabajo realizado en otras administraciones, en donde aparentemente el Conacyt ha permitido la creación de fideicomisos millonarios durante tres sexenios (esto bajo el consentimiento de los mandatarios, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto respectivamente), durante las administraciones de Jaime Parada Ávila (2001-2005), Gustavo Chapela Castañares (2005-2006), Juan Carlos Romero Hicks (2007-2011), Enrique Villa Rivera (2011-2013) y Enrique Cabrero Mendoza (2013-2018), esto justificado en nombre del “desarrollo científico, tecnológico y la innovación del sector”.
Aparentemente, la institución transfirió a empresas de corte privado más de 45 mil millones de pesos, asegurando que la mayoría eran empresas nacionales y transnacionales, que dicho sea de paso no requerían del financiamiento del Estado.
Esto es lo que dijo en 2021 sobre los cambios en la institución:
“Con el nuevo Conacyt tendremos más investigadores y científicos que hagan aportaciones como la que significó los ventiladores para tratar a los enfermos graves de Covid-19 y, el próximo año, si todo marcha bien, contaremos con la vacuna Patria”.
Ahora, el Presidente ha presentado esta iniciativa con la que pretende reemplazar a la institución. Además, dicha propuesta buscaría implementar la Ley General en materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación, así como el poder reformar a la Ley Federal de las Entidades Paraestatales y a la Ley de Planeación. Asimismo, buscaría dejar sin vigor a la Ley de Ciencia y Tecnología, y a la Ley Orgánica del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología.
Esto es lo que dice el documento turnado a comisiones de San Lázaro:
“La nueva ley convierte al Conacyt en el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación, que seguirá siendo un organismo público descentralizado del Estado mexicano, no sectorizado, con personalidad jurídica y patrimonio propio, que gozará de autonomía técnica y de gestión, bajo su propia normativa, que actúa como entidad asesora del Ejecutivo federal”.
Esto dice la propuesta de AMLO y la eliminación del Conacyt:
La propuesta de AMLO propone eliminar el voto para representantes de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), de dos investigadores en funciones, del SNI, y dos representantes del sector empresarial, mismos que son propuestos por el director general del Conacyt.
Con ello, el voto caería en manos de los representantes de la Secretarías de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER); la Secretaría Bienestar, Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT); la Secretaría de Cultura de Economía (SE); la Secretaría de Educación Pública (SEP); la Secretaría de Energía (SENER); la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP); la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA); la Secretaría de Marina (SEMAR); la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT); la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE); y la Secretaría de Salud (SSA).
La iniciativa señala que la ciencia, la tecnología y la innovación deben ser entendidos como instrumentos al servicio de la humanidad, y no como dispositivos utilizados en favor de la competitividad empresarial y la productividad laboral.
Además, establece que el director del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación deberá ser designado por el Ejecutivo, mientras que los recursos destinados al fomento de actividades científicas, humanistas, tecnológicas e innovadoras deberán ser otorgados a personas becarias sin implicaciones de intermediarios.
El organismo nuevo deberá asignar de forma universal becas a los estudiantes de las universidades públicas que estén inscritos en programas de maestría y doctorado en Ciencias y Humanidades, y de la misma manera a quienes se encuentren inscritos en posgrados del mismo corte. El Sistema Nacional de Posgrados tendrá la obligación de privilegiar los temas de interés principal del país, entre los que destacan el cuidado del agua, la cultura y la educación.
La discusión de la Ley que reformaría al Conacyt
Según el comunicado expedido por la Cámara de Diputados, el objetivo de este proyecto es el que se garantice el derecho humano a la ciencia reconocido en la fracción V del artículo 3 de la Constitución Política, a través de una política articulada por el Estado en materia de humanidades, ciencias, tecnologías e innovación, en las que el este ejerza la rectoría indispensable para el desarrollo nacional y el bienestar de la población.
A las sesiones de discusión, se solicitó la presencia de académicos que pudieran aportar información fundamental a la discusión:
“A las sesiones de la Junta de Gobierno se podrá invitar con voz, pero sin voto, a las personas servidoras públicas, académicas, humanistas, científicas, tecnológicas, innovadoras y, en general, a cualquiera que, por sus conocimiento y experiencia, se estime pudiese contribuir a la deliberación de los asuntos de competencia de la Junta de Gobierno”.
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